Obra

Vincent van Gogh produjo toda su obra (unas 900 pinturas y 1.600 dibujos) durante un período de solamente 10 años (etapa de 1880-90) hasta que sucumbió a la enfermedad mental (posiblemente un trastorno bipolar o una epilepsia).87 Decidió ser pintor cuando tenía 27 años y siempre quiso reflejar la vida en sus obras. Su carrera pictórica está marcada por los lugares donde vivió y trabajó. Así se aprecia en la primera etapa de los Países Bajos (1880-1886), donde la pintura tradicional y popular de este país, exclusivamente en colores terrosos, fueron lo que más influyó en obras como Los comedores de patatas y las pinturas sobre los tejedores. Realizó numerosos dibujos de mineros, de personajes populares y copió obras de su pintor favorito Millet.

La siguiente etapa, en París (1886-1887), es la que le pone en contacto con los impresionistas que pretendían romper con el academicismo de la época, con el traslado a la pintura de las impresiones de sus sentidos mediante la observación de la naturaleza.

Quizá Van Gogh representó mejor el posimpresionismo, estilo que sucedió aproximadamente en un periodo entre 1885 y 1915. Representó una vía divergente del impresionismo, donde los pintores hacen de la vida cotidiana su tema principal.

Su obra destaca por el uso del color y una técnica frenética que contiene algunos trazos del expresionismo. Van Gogh y Gauguin tenían técnicas diferentes; Gauguin acostumbraba a pintar normalmente en el taller de memoria y Van Gogh necesitaba siempre copiar in situ, fuesen paisajes o un modelo. Su temperamento exaltado quiso demostrarlo por la vía del color.

Desde el siglo XXI, el análisis del mensaje que se desprende de sus pinturas es positivo y alegre. Durante su breve dedicación artística, Van Gogh consiguió el dominio técnico y una productividad que pocos artistas han conseguido. En sus obras consiguió fusionar las cualidades de sus predecesores neerlandeses, como la devoción a la naturaleza, con el uso del color y la técnica de la pintura francesa.

La técnica que empleaba era diferente según el efecto que quería conseguir, cubría los planos con colores claros, mientras que en otros cuadros ponía pinceladas amplias y a veces perfilaba todo el dibujo con trazos gruesos. En otras ocasiones, trabajaba con un pincel duro rayando todas las formas, según le interesara, acentuaba las líneas o el color, el trazo con movimiento rítmico lo repetía tanto en los dibujos como en las pinturas.